No puedo iniciar con el relato sin hacer algunas consideraciones personales, primero seguramente muchos andamos diciendo que estamos grandes para historias pero en realidad las historias siempre son grandes para nosotros, segundo pensamos siempre en que tan dificil es lograr cambios,ello inicia con cambios de actitud,convencido estoy que las historias hacen bien ese trabajo. entonces ahi va...........
Cuentan que una serpiente empezó a perseguir desesperadamente a una luciérnaga. Ésta huía rápido y con miedo de la feroz depredadora, pero la serpiente no pensaba cejar en su intento. Se evadió un día pero el reptil no desistía, dos noches y nada; en el tercer día, y ya sin fuerzas, la luciérnaga se detuvo y dijo a la serpiente:
—¿Puedo hacerte tres preguntas? —
No acostumbro a hacer concesiones a nadie, pero, como te voy a devorar, puedes preguntarme. —¿Pertenezco a tu cadena alimenticia? —No. —¿Yo te hice algún mal? —No. —Entonces, ¿por qué quieres acabar conmigo?
—¡Porque no soporto verte brillar!
Sin duda un sentimiento altamente dañino y frecuente es la envidia, principalmente hacia quienes hace bien las cosas con quienes brillan por su esfuerzo, reflexionemos, acaso cuando brillemos queremos que abunden los envidiosos y nos quieran quebrar......evitemos la envidia que a nada bueno lleva
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